Hoy aspiro a que mi lector se quede con un sólo concepto: El funcionamiento del Bitcoin no es sencillo, pero no, ese no es. Aspiro a que mi lector se quede con que: el funcionamiento del dinero, crédito y deuda tampoco lo son. Si alguno de ustedes me puede explicar cómo se genera el dinero, de dónde viene y cuál es el funcionamiento a detalle de un banco, su manejo de deudas y crédtios, les puedo entregar el trabajo de blogger junto con su glamourosa paga en cuanto me contesten con un tutorial en youtube y me manden su CV a esta dirección.
El hecho es que la gran mayoría de la gente realmente no entiende como funciona el dinero ni de dónde viene. Pese a ello, cuando se trata de Bitcoin creen que esto es de algún modo negativo o un impedimento para su uso.
Si entender el funcionamiento no es fácil, entender el propósito es tal vez aún más complejo, al menos más subjetivo, si es que se puede definir un propósito premeditado. Sus usos y aplicaciones son, en el 2014, tan pocas que tal vez no tiene caso considerarlas tan seriamente. Hay muchos que lo usamos, pero pocos realmente compran BTC por que lo quieran gastar. Entonces, ¿por qué tiene valor una moneda que no se puede gastar?
Para contestar esta pregunta, hay que entender que durante todo el 2008 hubo transacciones, movimientos y nerds “minando” Bitcoin antes de que este tuviera algún valor, es decir, por un año, el valor del BTC fue $ 0.00. La clave aquí, es que los Bitcoins no se generaron arbitrariamente, lo cual sería equivalente a imprimir billetes sin control. El algoritmo sobre el cual están basados requiere que una computadora “mine” (donde minar = extraer = resolución rompecabezas para computadoras) cada Bitcoin para que este se genere, y entre al mercado. En cierto modo, eso equipara el valor de un Bitcoin con el tiempo de computación necesario para generarlo, lo cual se representa en cierto modo como el costo del equipo de computo y consumo energético.
El sistema es tal, que con el tiempo es cada vez más difícil extraer Bitcoins, de tal modo que la curva de disponibilidad se ve así:
Al principio era muy fácil extraer BTCs, al final será casi imposible.
La primera transacción con valor, el Genesis de lo que ahora sigue siendo basicamente una prueba, fue de 10,000 BTC, por una pizza. Bastante impresionante si consideramos que hoy en el 2014 el valor promedio de 1.0 BTC es de ≈ 400 USD, hoy esa pizza valdría alrededor 250,000 USDs.
La conclusión de todo esto es que, lo que va a suceder con el BTC, nadie lo sabe. Pero, no necesitamos saberlo para usarlo y aprovecharlo. El peso mexicano se ha devaluado varias veces, y conociendo a nuestro país, es probable que vuelva a suceder y eso no significa que no lo podamos usar. Podemos verlo como inversión o simplemente ver su valor utilitario, para comprarnos unas vacaciones en expedia.com, dar un regalo de bodas o para pagar una deuda transatlántica. Lo importante es que el BTC funciona, experimenten y verán. Puede que en 10 años, cuando el BTC valga 1,000,000 USDs, le cuenten a sus nietos como su primer compra de BTC en Volabit ahora valdría lo mismo que su casa.
Texto: Everardo Barojas. Ilustración: Arturo Trujillo
